Las «Confesiones negativas»

A propósito de la importancia de la elección de jueces y magistrados de la Corte Suprema de Justicia en Guatemala.

El tribunal de Osiris. Tebas, Dinastía XXI, 1075-945 a.C.
El tribunal de Osiris. Tebas, Dinastía XXI, 1075-945 a.C.

En el Libro de los Muertos, del antiguo Egipto, destacan en el capítulo CXXV las Confesiones negativas que las almas de los difuntos debían hacer para justificar sus acciones en vida ante el tribunal de Osiris (en cuanto a conciencia y moralidad). Quienes superaban la prueba podían llegar a los fértiles campos de Arau (una especie de paraíso). Según lo egipcios, las almas debían justificarse así:

“Traigo en mi corazón la verdad y la justicia, pues he arrancado de él todo mal. No he hecho sufrir a los hombres. No he tratado con los malos. No he cometido crímenes. No he hecho trabajar en mi provecho con abuso. No he maltratado a mis servidores. No he privado al necesitado de lo necesario para la subsistencia. No he hecho llorar. No he matado ni mandado matar. No he tratado de aumentar mis propiedades por medios ilícitos ni de apropiarme de los campos de otro. No he manipulado las pesas de la balanza. No he mentido. No he difamado. No he escuchado tras las puertas. No he cometido jamás adulterio. He sido siempre casto en la soledad. No he cometido con otros hombres pecados contra la naturaleza. No he faltado jamás al respeto debido a los dioses.”

Deja un comentario